El éxito de una empresa está determinado por muchos parámetros, indicadores para los cuales a menudo se destacan en las explicaciones del estado actual del negocio. Pero lo más importante para explicar los éxitos y fracasos del negocio no radica en los datos secos, sino en los mecanismos de gestión de vida, que incluyen la cultura de interacción entre el gerente y el personal.
En los últimos años, ha surgido una capa completa de líderes inteligentes que utilizan la inteligencia emocional en sus tácticas de gestión. Sus herramientas ayudan a escuchar con mayor eficacia y, si es necesario, tranquilizar a los empleados, teniendo en cuenta sus intereses y necesidades. Los siguientes consejos de líderes exitosos lo ayudarán a dominar estas habilidades y mejorar la atmósfera en el equipo.
1. Explicación de la falta de crecimiento profesional.
Una de las quejas más comunes que nunca puede ser desestimada por un jefe inteligente. Es necesario crear condiciones en las que el avance profesional sea abierto y motivado en cada caso. La apertura de las discusiones sobre las decisiones del personal también será la regla correcta dentro del marco de lo que es aceptable desde el punto de vista de la ética corporativa. En tales circunstancias, los empleados entenderán por qué no se ven afectados por las permutaciones. Y lo más importante es mostrarles los objetivos y las oportunidades para cambiar la situación, ya que gran parte de su crecimiento profesional depende de ellos mismos.
2. Arreglando cambios emocionales en un empleado
Un cambio en el comportamiento de uno u otro miembro del colectivo no debe pasar sin dejar rastro a los ojos del jefe. Debe hablar con franqueza con un empleado que se ha vuelto más retraído, menos sociable y distraído.
3. Trabajar con los miedos de los empleados.
Los empleados concienzudos y responsables a los que se les asignó la tarea de llevar a cabo un gran proyecto bien pueden tener la incertidumbre de que puedan hacer frente. Esta no es una buena señal, porque las consecuencias pueden ser tristes para la propia empresa. Por lo tanto, también es importante hablar con un empleado así, averiguar las razones de su incertidumbre. La solución podría ser su entusiasmo con la motivación y el apoyo personal y, posiblemente, el refuerzo con recursos, si es necesario.
4. Combatir el aburrimiento y la rutina.
Una ocurrencia común cuando los empleados simplemente se aburren de las mismas tareas y procesos laborales de rutina. No sienten las perspectivas de desarrollo profesional y realmente no se esfuerzan por alcanzarlas. En tales casos, el líder debe establecer nuevas metas ambiciosas con un nivel diferente de complejidad. Según los expertos, las tácticas de proponer tareas destinadas a revelar nuevas habilidades y destrezas arrojarán buenos resultados.
5. Discusión de prioridades
La falta de iniciativa pasada y un enfoque creativo para el desempeño de sus funciones sugiere que el empleado está en crisis. Es importante discutir con él las prioridades que él mismo establece en sus actividades profesionales. Quizás el problema se resolverá cambiando las condiciones de trabajo o el perfil de actividades dentro de la misma empresa.
6. Discusión de fallas
Los errores en el trabajo con fallas obvias debido a fallas de los empleados son comunes. Pero un líder inteligente no seguirá el camino de las multas y otras sanciones hasta el despido. Al menos, el simple hecho de cometer un error no da motivos para tales decisiones. Especialmente si el empleado mismo está preocupado por esto, lo que afecta su trabajo.Inicialmente, debe explicarse que las fallas verdaderas surgen solo en tres casos: cuando una persona no trata de mejorarse a sí misma, cuando básicamente no intenta hacer nada para resolver el problema y cuando simplemente se retira.
7. Desglose del aislamiento de los principiantes.
Un equipo fuerte y unido con un alto nivel de motivación tiene un inconveniente significativo: es difícil adaptarse a los recién llegados que provienen de equipos con una cultura corporativa diferente. Como resultado, incluso un empleado valioso para la empresa puede sentirse como un extraño, como resultado, tomando una decisión sobre el despido. El comportamiento de los empleados aislados solitarios es especialmente evidente en las horas de almuerzo después de planificar las reuniones y la finalización de las horas de trabajo. En tales situaciones, solo ayudarán las medidas especiales para familiarizar a los empleados con el equipo. Puede realizar asignaciones para miembros respetados del equipo con gran experiencia, de modo que contribuyan a la entrada rápida y favorable de los recién llegados a un equipo establecido.
8. Mejorando la confianza y la motivación
De vez en cuando, cada miembro del equipo pierde la fe en sí mismo bajo la presión de las tareas laborales y en el contexto de la misma rutina diaria con fatiga general. La situación en sí misma lleva al agotamiento, como resultado de lo cual el personal más responsable y fuerte comienza a necesitar una recarga adicional.
En este caso, un líder como nadie más puede proporcionar apoyo psicológico inculcando fe en sus subordinados. Es importante dejar en claro que nadie es perfecto y que siempre debe confiar en los éxitos y potenciales, sin centrarse en los factores negativos que de alguna manera tienen su lugar en la carrera de cualquier persona.